Aves de mar

De peluca amarilla, mojada de llovizna dominical, que se dejo caer desde temprano, hinchado de frío estas allí, atisbando tímido e incierto, esperando que el deshuesador de peces se apiade con una fuente de delicioso desecho marino.

Al lado de Juan Salvador te asientas en paciencia turística, posando para miles de fotos de medio día.

Es hora del aperitivo, muchos deben celebrar el termino de Agosto, otros la llegada del amigo extranjero y yo las notas de excelencia académica que Javy dicta en diseño.

No falta el motivo, siempre habrá alguien en ese lugar, donde las olas te llevan al plato la marejada del día.

Tú, sigues allí, impávido y a la espera de un buen bocado que llegará tarde o temprano, divirtiendo a toda la concurrencia con tu pesado despliegue de gigantescas alas y pesada despensa que llevas escondida bajo tu enorme pico.

Pelicano de plumas tiesas y entretenido porte, me divierte mirar, tu exótico plumaje y estoica parada.

Olvide mi cámara, sin embargo te he inmortalizado miles de veces en estas costas, encontraré alguna que te muestre en demasía.